Esta esquizofrénica existencia entre los dos mundos opuestos me hizo reflexionar sobre la diferencia principal, o incluso abismal, que en nuestra época se produce entre el tiempo de la cultura material (o, dicho de otra forma, de la vida cotidiana) y el de los acontecimientos políticos. En el medievo los dos tiempos mantenían un ritmo concordante, acorde: se tardaba siglos en construir las ciudades y siglos duraban las dinastías.
Hoy la situación es diferente: las ciudades se construyen en decenas de años, mientras que los gobernantes, si es que no cambian cada cuatro meses, duran, como mucho, una década. El escenario político gira a un ritmo mucho más rápido que el de nuestra existencia cotidiana. Cambian los regímenes, cambian los partidos gobernantes y sus líderes, mientras el hombre gris vive como siempre ha vivido, sigue sin tener piso o trabajo; las casas siguen desconchadas, las calzadas de las calles aparecen llenas de socavones y la gente, desde la mañana hasta la noche, se dedica a intentar llegar a fin de mes.
Tal vez por este motivo muchas personas dan la espalda a la política, que para ellas es otro mundo, un mundo que vive a un ritmo muy diferente del suyo: el ritmo en que transcurre la vida del hombre corriente.

Ryszard Kapuscinski. El imperio.



ETA, la costumbre de odiar por JOSÉ MARÍA GUELBENZU



fuego

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Conozco personas que son expertas en el fuego, saben sus hábitos para poder apagarlo cuando se lanza como incendio. Conocen en los bosques la llama que se arrastra bajo las cenizas e intenta encenderse más lejos. Saben que el castaño arde mal y que el pino de Aleppo, atacado por el fuego, lanza semillas y se esparce. Saben que la encina no resurge y que el bosque viejo resiste mejor, porque los bosques son personas y acumulan experiencias. Saben que arde mejor la ladera sur que la norte. Saben que el fuego es rojo, naranja y negro, pero que al principio es blanco y gris.

Erri de Luca. Tras los pasos de Nives,



tiempos

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Esta esquizofrénica existencia entre los dos mundos opuestos me hizo reflexionar sobre la diferencia principal, o incluso abismal, que en nuestra época se produce entre el tiempo de la cultura material (o, dicho de otra forma, de la vida cotidiana) y el de los acontecimientos políticos. En el medievo los dos tiempos mantenían un ritmo concordante, acorde: se tardaba siglos en construir las ciudades y siglos duraban las dinastías.
Hoy la situación es diferente: las ciudades se construyen en decenas de años, mientras que los gobernantes, si es que no cambian cada cuatro meses, duran, como mucho, una década. El escenario político gira a un ritmo mucho más rápido que el de nuestra existencia cotidiana. Cambian los regímenes, cambian los partidos gobernantes y sus líderes, mientras el hombre gris vive como siempre ha vivido, sigue sin tener piso o trabajo; las casas siguen desconchadas, las calzadas de las calles aparecen llenas de socavones y la gente, desde la mañana hasta la noche, se dedica a intentar llegar a fin de mes.
Tal vez por este motivo muchas personas dan la espalda a la política, que para ellas es otro mundo, un mundo que vive a un ritmo muy diferente del suyo: el ritmo en que transcurre la vida del hombre corriente.

Ryszard Kapuscinski. El imperio.

(Arriba, un dibujo que hice en Cuenca un dia de mucho calor. Puede verse una versión a más tamaño aquí. Algunas fotos, aquí.)



Una pincelada verde en una tela gris por ANDREA LANAIA



Proponer sin imponer, cuestionar sin condenar por JUAN MASIÁ



Irán debe celebrar nuevas elecciones por SHIRIN EBADI – 20-06-2009



La paradoja de la socialdemocracia por LUDOLFO PARAMIO – 19-06-2009



Políticas de izquierda, gobiernos de derecha por ANTONIO ESTELLA. EL PAIS | Opinión – 09-06-2009



¡Los de Múnich, a la horca! por JOSÉ VIDAL-BENEYTO. EL PAIS | Opinión – 06-06-2009



EL PAIS | Opinión – 03-06-2009 Un vídeo sacude a Guatemala por DINA FERNÁNDEZ



Reino Unido necesita una Constitución por TIMOTHY GARTON ASH. EL PAIS | Opinión – 30-05-2009



¿Para qué queremos Parlamento Europeo? por XAVIER VIDAL FOLCH. El País. Opinión. 22-5-09



Vivir en México por SERGIO AGUAYO. EL PAIS | Opinión – 01-05-2009



Del mesianismo al pragmatismo porJESÚS A. NÚÑEZ VILLAVERDE. EL PAIS | Opinión – 30-04-2009



Incógnitos torturadores futuros por PRUDENCIO GARCÍA. EL PAIS | Opinión – 28-04-2009



Las raíces de la crisis en el Este por JIRI PEHE. EL PAIS | Opinión – 27-04-2009



Los países del Este miran a Occidente por NORMAN MANEA. EL PAIS | Opinión – 24-04-2009



Ayer y hoy se celebra el V Homenaje a las Víctimas del Campo de Concentración de Castuera.

Se ha conseguido la incoación del expediente Bien de Interés Cultural y la declaración parece inminente, aunque aún queda mucho por hacer: la exhumación de fosas, las prospecciones e intervenciones arqueológicas, el Memorial, el monumento-homenaje, el Centro de Interpretación…
Todo ello parece estar supeditado a que el Campo sea oficialmente Bien de Interés Cultural, de ahí la necesidad de demandar a las instituciones la urgente declaración de este lugar como Sitio Histórico para poder comenzar dichas actuaciones.



Treinta años gobernando la proximidad por JOAN SUBIRATS. EL PAIS | Opinión – 15-04-2009



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